La Trapería

¡Hola chicas… y chico! Pues sí, que nos estamos americanizando como el que no quiere la cosa y a lo tonto a lo tonto nosotros entramos a trapo, porque nosotros lo valemos y porque en ingles, como que hay cosas que suenan mejor. Porque no es lo mismo decir Pepa Pig que Josefa la cerda…jjj   Yo para no ser menos y porque me apetecía un montón hacer estas botas de bruja como adorno para la puerta, sigo el rollo y le pongo empeño. Y en Halloween no pueden faltar los fantasmas así que, ¡marchando una de fantasmas...! ...o tres. Otra de las cosas que no pueden faltar en estas fiestas son las calabazas…aunque sean de bote. Las mías, además, convertidas en candelabros que con unas velas de aroma de naranja perfuman el ambiente que da gusto. ¡Feliz Castañada! Besos

¡Hola chicas… y chico! Si a mi el Verano me sienta como un tiro, todo lo contrario me ocurre con el Otoño, quizás porque nací en esta estación y me gusta más un día nublado que a un tonto un tambor…jjj ¿No os pasa a veces, que tenéis un montón de cosas para hacer y no sabéis por dónde meterle mano…?. Lo miráis, lo remiráis y de nuevo vuelve al sitio del que salió (y nada mas sacarlo crece, porque luego no cabe… ¡NO CABE!), esperando que las musas te peguen un empujón y te espabilen de golpe. Bien, pues eso es lo que me ha ocurrido a mi, ¡bendito empujón!. Os enseño unos cuantos proyectos que en esta semana han visto la luz: Una caja de pañuelos bordada y una bandeja vacía bolsillos que yo utilizare para vaciarme las orejas (de pendientes se entiende), los dedos y las muñecas. Me pareció una buena idea para poner en mi mesita de noche, con el tiempo que se avecina siempre es muy cómodo tener pañuelos a mano.   Cuando yo creía que ya me había librado… mi “pe

¡Hola chicas… y chico! Hoy os enseño el último grito en joyería. ¡Ahhhhhhhhhhhhhhhh…!   Aunque yo no soy de llevar mucho abalorio encima y para nada me gustan las joyas ostentosas, cuando vi estas monerías, no pude resistir la tentación de hacerlas. Están confeccionadas con hilo plateado y el punto del encaje puede variarse en función del gusto de la encajera. Para los dos anillos y la pulsera yo he elegido el punto eslavo, es una variante del punto de la virgen que como no es muy común le da un toque diferente. El colgante y los pendientes están realizados con el punto de rejilla, para mi un punto “muy Señor”, como podéis ver la malla resultante es mas tupida que la anterior, proporcionando al encaje una trama más espesa y en consecuencia con algo más de cuerpo. Si queréis ver más joyas aqui hay otra muestra. Desde luego esto del encaje ya no es lo que era… ¡Ay!…si mi abuela levantara la cabeza. Obviamente se daría con la tapa jjj ¿Os gusta? Besos